El Convento del Santo Espíritu de Gilet (Valencia) ha sufrido un ataque ayer por parte de un desalmado. Un hombre de mediana edad consiguió colarse al convento, y con objetos contundentes que encontró en el mismo monasterio comenzó a moler a palos a los pobres frailes al grito de "yo soy Jesucristo y voy a matar a los frailes". Aunque las informaciones son un poco confusas, lo que si se sabe es que consiguió golpear fuertemente a cuatro hermanos y uno por el momento está en estado crítico. El asesino todavía anda suelto a espera de que lo capturen lo antes posible.
Estos hechos son una gran desgracia para la comunidad franciscana y para todos aquellos, que como una servidora, han conocido personalmente a esta comunidad y a los frailes implicados. ¡Todos buenos hombres y frailes de Dios!!
Como Caballeros de la Inmaculada no podemos permanecer indiferentes ante estos sucesos tan desagradables. Por ello, es nuestra obligación coger el arma del Santo Rosario y usarla en estos duros momentos que está corriendo la Iglesia. La oración es nuestra arma más importante, y con ella podemos ayudar a tantos y tantos en el mundo. Por ello os invito a una oración por esta pequeña gran comunidad de hermanos.
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