Nuestra Señora Desatanudos
(Por: Lady Cobo)
La advocación de Nuestra Señora Desatadora de Nudos se remonta a un antiguo escrito de San Ireneo, obispo de Lyon (130-202), quien a la luz del paralelismo paulino Adán-Cristo desarrolla el de Eva- María, afirmando que “Eva por su desobediencia, ató el nudo de la desgracia para el género humano; en cambio María, por su obediencia lo desató”. Así nace la advocación de la Virgen Desatadora de Nudos.
Esta advocación Mariana se basa en una pintura al óleo, del pintor alemán Johann Melchior Georg Schmittdner, la cual formaba parte del retablo de “las Beatas Vírgenes del Buen Consejo”, donada a la iglesia “St. Peter am Perlach”, en la ciudad de Augsburgo Alemania, en 1700, año en que se cree dicha obra fue pintada.
HISTORIA:
La pintura que muestra a Nuestra Señora desatando los nudos de una cinta blanca de boda, fue realizada bajo encargo hacia el año 1700, por el padre Hieronymus Ambrosius Langenmantel, en acción de gracias por su intercesión en su familia.
A comienzos del siglo XVII, los familiares del padre Hieronymus, el noble Wolfgang Langenmantel y su esposa Sofía, comenzaron a tener problemas en su matrimonio.
Habiendo alcanzado el punto de considerar el divorcio, se acercaron al sacerdote jesuita Jakob Rem que vivía a 10 km del norte de Augsburgo. La pareja hizo cuatro visitas a este sacerdote a fin de rezar con él y recibir su consejo, en un período de 28 días. Durante su última visita, el padre Rem estaba rezando ante la imagen de Nuestra Señora; y en un acto simbólico levantó la cinta blanca de boda y se la presento a Nuestra Señora, desatando uno a uno los nudos de la cinta. En el momento que la cinta era presentada a Nuestra Señora, tomó el color de un blanco brillante. Tiempo después esta pareja perteneciente a la nobleza, perseveró en su matrimonio y cesó todo peligro de divorcio.
La pintura que el padre Hieronymus encargó en acción de gracias por la intervención de Nuestra Señora, todavía permanece en el altar de la iglesia de St. Peter am Perlach en Augsburgo, Alemania.
INTERPRETACION DE LA IMAGEN:
María Santísima está entre el cielo y la tierra como la Inmaculada Concepción con su manto azul y vestido rojo, símbolo del poder y el amor espiritual. Desde la luminosidad de Dios baja el Espíritu Santo sobre Ella y la circunda de luz divina expresando las palabras sagradas: “Tu eres la llena de gracia” Por ello su cabeza está adornada con doce estrellas, dones de los doce rayos o aspectos de Dios.
Recibe en sus manos de un ángel una cinta blanca símbolo de nuestra alma espiritual que esta anudada por los problemas en los que se envuelve la personalidad. El ángel que le alcanza la cinta con nudos grandes y pequeños, separados y amontonados, es el pecado original con todas sus consecuencias, y que está tan anudado en nuestra vida: nudos de la vida personal, de la vida familiar, de la vida del trabajo de cada uno, en cada vida comunitaria, y también los nudos de los pueblos. Estos nudos aumentan nuestra fragilidad humana y nos defraudan.
Ella amorosamente los desata y pasa la cinta sin nudos y lisa al ángel que se encarga de recoger la gracia milagrosa de nuestra madre para entregársela a nuestro ángel guardián, y así recibir el bien que se ha pedido. Debajo de sus pies domina la serpiente, símbolo de las fuerzas oscuras que controla el demonio y que ella puede fácilmente dominar. La luna nos indica su condición de madre celestial.
En la parte de abajo se observa el arcángel san Rafael socorriendo y guiando a Tobías por el verdadero sendero del amor divino. Esto nos indica que María actúa junto a este poderoso arcángel sanador de toda situación.
La paloma blanca representa la Gracia del Espíritu Santo que actúa a través de ella con el máximo poder. Esta advocación se ha expandido particularmente en relación con problemas matrimoniales y familiares.
Solo en el siglo XX esta imagen mariana saldría de los confines europeos para darse a conocer en el Nuevo Mundo. Cuando el entonces padre Jorge Mario Bergoglio, hoy papa Francisco, conoció por primera vez esta imagen, se enamoró de inmediato de esta devoción.
Era la segunda mitad de los años ochenta. En 1986 el padre Bergoglio viajó a Augsburg, ciudad en el sur de Alemania, para completar su tesis doctoral sobre el teólogo alemán Romano Guardini. Durante su estancia en Alemania visitó la iglesia de St. Peer am Perlach administrada por sus cohermanos de la orden religiosa de la compañía de Jesús. Fue allí donde Bergoglio vio por primera vez el lienzo con el diseño de María Santísima que desata los nudos, conoció su historia, su devoción y decidió llevarse la “desatadora de nudos” a Buenos Aires como un regalo para sus feligreses. En Argentina, el ya obispo Bergoglio comenzó a distribuir la imagen a sacerdotes y fieles de su diócesis. En una de sus homilías en la ciudad de Buenos Aires, el entonces obispo Bergoglio, hoy nuestro papa Francisco decía, a propósito de la advocación, a sus fieles: “Dios, que derrocha su gracias para sus hijos, quiere que nos confiemos a Ella: que le confiemos los nudos de nuestros pecados para que ella se los acerque a su hijo Jesús”.
Esta advocación es sin duda la más personal del papa Francisco y por la que él siente especial cariño. La Virgen Desatadora de nudos es una representación de la Inmaculada Concepción, por lo que su fiesta se celebra el 8 de diciembre.
Mensaje transmitido por La Virgen María, Señora Desatadora de Nudos, al vidente Fray Elías del sagrado corazón 25 de septiembre del 2014.
Queridos hijos:
Yo vengo del Cielo como una Estrella de Confraternidad, de Luz y de Oración. Hoy vengo al mundo para que a través de un acto de arrepentimiento y de perdón, él sea depositario del Reino de Mi Paz.
He venido trayendo entre Mis sagradas manos los nudos que están amarrando vuestras vidas. Solo a través de vuestra fe y determinación de alcanzar la santidad en esta vida planetaria, es que Yo podré ayudarlos a desatar los nudos que los ahogan y que no los dejan respirar Mi aire celestial.
Por medio de Mi Gracia Maternal y por la divina autoridad que me ha dado Mi Hijo, vengo a desatar el nudo para liberar así a la humanidad; para que esto sea posible, vuestras oraciones y ofertas sinceras a Mi Inmaculado Corazón permitirán que se abran las puertas para la redención de los corazones.
Una y otra vez Yo he descendido en Gloria sobre esta bendita colina, la que se ha convertido en el punto de luz para esta región.
Pero Yo necesito de ustedes, necesito que vuestros corazones sean luceros de amor y de paz para el mundo; de esa forma ustedes podrán disolver los nudos que se guardan en vuestras pequeñas y simples consciencias.
Solo a través del poder del Santo Rosario, conseguirán vivir el camino de la purificación y de la santidad, vuestras almas deben convertirse en espejos vivos de la Voluntad de Dios; así por medio de Mi intercesión, vuestros pasos y huellas serán más luminosos, serán las huellas de los apóstoles de Mi Hijo.
Hoy desato especialmente el gran nudo de la incomprensión y del mal sentimiento; nudo que el enemigo pacientemente se ha dedicado a crear en las mentes de los que no dedican tiempo a la oración del corazón.
Quien me suplique de corazón y de alma, de fe y de espíritu, Yo prometo ayudarlo a desatar los nudos a través de la siguiente oración carismática:
Oración Carismática a Nuestra Señora Desatadora de Nudos
Señora del Poder Celestial, desata de nuestra consciencia todos los nudos que nos oprimen y cierran nuestros caminos.
¡Señora Desatadora de Nudos!, corta y libera las amarras de la vida, que Tu Luz de Sabiduría Divina destierre y disipe los abismos de este mundo.
Que Tu manto celeste de protección y amparo, nos guarde eternamente bajo el poder de Tu Amor y de Tu Guía.
¡Sagrada Madre que desatas todos los nudos!, que junto a Tus Ángeles y Arcángeles nuestras vidas sean desamarradas por la imposición de Tus sagradas manos.
Ora por nosotros, todos los días que vendrán, para que unidos a Tu Consciencia Maternal veamos venir en Gloria el día de nuestra redención, el día del Retorno de Cristo, Nuestro Salvador. Amén.
Como Caballeros de la Milicia del Inmaculado Corazón de María, ¿cómo debemos responder ante el mensajes de Nuestra Señora Desatanudos?
Nuestra Madre necesita que nuestros corazones sean luceros de amor y de paz para el mundo; debemos orar de corazón su oración para desatar los nudos de la Humanidad.
Rezar el Santo Rosario, para vivir el camino de la purificación y de la santidad, nuestras almas deben convertirse en espejos vivos de la Voluntad de Dios.
Nuestra Madre nos invita a la oración porque dentro de la oración encontraremos todas las llaves que necesitamos como humanidad.